El primer trasplante de arteria pulmonar del mundo se realizó en el Hospital Sant'Andrea de Roma.

En el Hospital Sant'Andrea-Sapienza de Roma, un equipo de la Unidad de Cirugía Torácica realizó una operación única: un trasplante de arteria pulmonar combinado con la extirpación completa del pulmón izquierdo. La intervención tuvo lugar el 17 de julio, gracias a la visión de las jóvenes cirujanas torácicas Cecilia Menna y Beatrice Trabalza Marinucci , y fue llevada a cabo por un equipo liderado por Erino A. Rendina , director de Cirugía Torácica del Sant'Andrea y decano de la Facultad de Medicina y Psicología de la Sapienza.
El banco de tejidosLa paciente, mayor de 70 años, fue dada de alta tras cuatro semanas de hospitalización y se encuentra bien. El trasplante de arteria pulmonar se realizó con un segmento arterial criopreservado de aproximadamente 5 cm de longitud, procedente del Banco de Tejidos de Barcelona, que se ajustaba perfectamente al tamaño del vaso de la paciente, ya que presentaba un tumor que infiltraba la arteria. La intervención, que duró cuatro horas y media, fue precedida en los meses anteriores por quimioterapia e inmunoterapia, con una innovadora combinación de fármacos de terapia dirigida que produjo una notable reducción del tamaño del tumor.
¿Cómo salió la cirugía?Sin embargo, se extirpó la arteria enferma por completo, junto con todo el pulmón izquierdo y una porción de la tráquea. A continuación, se inició la reconstrucción de la tráquea y las vías respiratorias. Solo entonces fue posible proceder con el trasplante de la arteria pulmonar. Uno de los principales desafíos para reemplazar la arteria pulmonar, un tubo delgado pero resistente, es restablecer su tensión equilibrada. Los materiales sintéticos o biocompatibles existentes no permiten crear un conducto de reemplazo con las mismas características que el original, lo que expone al vaso reconstruido al riesgo de obstrucción.
Capaz de hablar inmediatamenteLa paciente fue trasladada a la unidad de cuidados intensivos para observación posoperatoria rutinaria y despertó a las pocas horas, pudiendo respirar y hablar de forma independiente de inmediato. La evolución posoperatoria transcurrió sin complicaciones, a pesar de un derrame pleural que se resolvió durante la hospitalización. Durante su estancia hospitalaria, se le realizaron pruebas radiológicas avanzadas que demostraron la restauración completa del flujo sanguíneo del corazón al pulmón derecho y el excelente estado del injerto vascular.
Sin inmunosupresoresHoy la paciente ha retomado su vida normal y no requiere terapia inmunosupresora, como ocurre con otros trasplantes de órganos (corazón-pulmón, etc.), ni terapia anticoagulante dada la perfecta biocompatibilidad del tejido.
El equipo que operó a la mujer estaba compuesto por cirujanos torácicos, cirujanos cardíacos, anestesiólogos y reanimadores, además de perfusionistas y personal de enfermería de quirófano y de planta. «Estoy muy bien», comentó la paciente por videoconferencia durante la rueda de prensa.
La Repubblica



