Salud. Muerte de Thierry Ardisson: Lo que necesita saber sobre el cáncer de hígado.

El fallecimiento de Thierry Ardisson el 14 de julio a los 76 años por cáncer de hígado es un recordatorio de la gravedad de esta enfermedad, que es la tercera causa principal de muerte por cáncer en todo el mundo. Sin embargo, en la gran mayoría de los casos, esta patología podría prevenirse.
El cáncer de hígado afecta a aproximadamente 10.500 nuevos casos cada año en Francia y presenta un perfil muy específico. Ocho de cada diez pacientes son hombres, lo que lo convierte en uno de los cánceres con mayor especificidad de género.
La edad también es un factor determinante: el 40 % de los pacientes tienen entre 50 y 69 años al momento del diagnóstico, mientras que la mitad tiene más de 70. ¿El tipo más común? El carcinoma hepatocelular o hepatocarcinoma.
El alcohol, responsable de uno de cada dos casosA diferencia de otros cánceres con múltiples causas, el cáncer de hígado tiene un culpable claramente identificado: el alcohol. Representa la mitad de los nuevos casos diagnosticados cada año. ¿Lo más preocupante? No es necesario ser alcohólico para desarrollar esta enfermedad.
Como señala el Instituto Curie, « el consumo de uno o más vasos de bebidas alcohólicas al día, incluso si no provoca adicción ni cirrosis hepática, también se considera un factor de riesgo ». Otros factores como la obesidad, la diabetes tipo 2, las hepatitis B y C, y el tabaco también aumentan los riesgos.
Una enfermedad silenciosa que se revela tardeEl cáncer de hígado es un enemigo sigiloso. Puede permanecer completamente inactivo durante meses o incluso años, por lo que el diagnóstico suele realizarse en una etapa avanzada. Cuando aparecen los primeros síntomas, lamentablemente son anodinos: fatiga persistente, problemas digestivos, pérdida de peso inexplicable, náuseas.
Sólo a medida que la enfermedad progresa aparecen signos más específicos, como ictericia o ascitis, una hinchazón del vientre causada por la acumulación de líquido en el abdomen.

A diferencia de otros cánceres con múltiples causas, el cáncer de hígado tiene un culpable claramente identificado: el alcohol. Representa la mitad de los nuevos casos diagnosticados cada año. ¿Lo más preocupante? No es necesario ser alcohólico para desarrollar esta enfermedad.
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Información crucial: El cáncer de hígado rara vez se desarrolla en un órgano sano. En la gran mayoría de los casos, se presenta en un hígado ya debilitado por una enfermedad crónica como la cirrosis o la hepatitis B o C.
Esta particularidad la convierte en una enfermedad en gran medida evitable: cuidando el hígado, limitando el consumo de alcohol, protegiéndose de la hepatitis y manteniendo un peso normal, se pueden reducir considerablemente los riesgos.
El hígado, este órgano vital situado en la parte superior derecha del abdomen, juega un papel esencial en la desintoxicación del organismo y tiene una notable capacidad de regeneración.
Tratamientos que dependen del estadio de la enfermedadEl tratamiento varía considerablemente según la extensión del cáncer. En el caso de un tumor pequeño y localizado, los cirujanos pueden realizar una ablación parcial del hígado, aprovechando su capacidad regenerativa. La destrucción por radiofrecuencia es una alternativa menos invasiva. Cuando el tumor es más grande o está muy extendido, se puede considerar un trasplante de hígado completo, pero esta opción sigue siendo compleja porque el hígado suele estar ya debilitado por la enfermedad subyacente.
La destrucción percutánea del tumor es una alternativa a la cirugía. Esta técnica utiliza calor (radiofrecuencia) o frío (crioterapia) para destruir el tumor a través de la piel sin abrir el abdomen. Finalmente, cuando no es posible destruir o extirpar el tumor, la quimioterapia puede ralentizar el crecimiento del cáncer.
Le Progres