Intoxicación por E. coli en Aisne: «Una bacteria como esta no surge por casualidad», demanda una familia al Estado.

Las pruebas realizadas tras la muerte de un niño de 11 años y una serie de intoxicaciones alimentarias graves en Saint-Quentin y sus alrededores han confirmado el vínculo con varios de los carniceros sospechosos .

El Sr. Ludot deplora la falta de trazabilidad de la carne en estas carnicerías, «que nunca han sido inspeccionadas, o rara vez lo han sido». «Al parecer, puede que nunca se hayan realizado controles». «No hay inspecciones sin previo aviso; no se verifica el estado de los sistemas de refrigeración ni las condiciones de almacenamiento de la carne», continúa el abogado. Para él, el Estado «tiene que rendir cuentas».

Los dos hijos de la familia estuvieron hospitalizados durante una semana. Hoy, según el Sr. Ludot, se encuentran "físicamente bien, pero no tan bien psicológicamente". "Pero escapamos de la tragedia y, afortunadamente, sobrevivieron".