Hito histórico en cirugía: Realizan el primer trasplante de vejiga en un ser humano

Cirujanos de UCLA Health en la Universidad de California y de Keck Medicine de la Universidad del Sur de California (USC) han llevado a cabo el primer trasplante de vejiga del mundo en un ser humano.
El paciente, Oscar Larrainzar, había perdido la mayor parte de su vejiga durante la extirpación de un tumor. Lo que restaba de órgano era demasiado pequeño y había quedado comprometido para funcionar. Posteriormente, también le quitaron ambos riñones debido a un cáncer renal en el contexto de una enfermedad renal preexistente en su última fase. Como resultado, estuvo en diálisis durante siete años.
El procedimiento se completó con éxito en el Centro Médico Ronald Reagan de la UCLA el 4 de mayo de 2025, según informa UCLA Health en un comunicado. Se trata de un hito histórico para la medicina, en el que participaron el doctor Nima Nassiri, cirujano urólogo especializado en trasplantes y director del Programa de Trasplante de Aloinjerto de Vejiga Compuesta Vascularizada de la UCLA, y el doctor Inderbir Gill, director ejecutivo fundador del área de Urología de la USC.
«El riñón produjo inmediatamente un gran volumen de orina y la función renal del paciente mejoró al instante. No hubo necesidad de diálisis después de la cirugía y la orina se drenó correctamente a la nueva vejiga«, explica el doctor Nassiri.
«A pesar de la complejidad del caso, todo salió según lo previsto y la cirugía fue un éxito. El paciente se encuentra bien y estamos satisfechos con su progreso clínico hasta la fecha», añade el doctor Gill.
Inderbir Gill, que también es catedrático y profesor distinguido de Urología y catedrático Shirley y Donald Skinner de Cirugía Oncológica Urológica en la Facultad de Medicina Keck de la USC, asegura que esta cirugía «marca un hito histórico en la medicina y podría influir en la forma en que tratamos a pacientes cuidadosamente seleccionados con vejigas terminales altamente sintomáticas que ya no funcionan«. »El trasplante es una opción de tratamiento que salva y mejora la vida de muchas patologías que afectan a órganos principales, y ahora la vejiga se suma a la lista«, añade.
Este primer intento de trasplante de vejiga se ha gestado durante más de cuatro años, según cuenta el doctor Nassiri. «Para el paciente, seleccionado adecuadamente, es emocionante poder ofrecer una nueva opción potencial», apunta.
«El trasplante de vejiga ha sido el principal enfoque académico del doctor Nassiri desde que lo incorporamos a la facultad de la UCLA hace varios años. Es sumamente gratificante verlo llevar este trabajo del laboratorio a pacientes humanos en la UCLA, que opera el programa de trasplante de órganos sólidos más activo y exitoso del oeste de Estados Unidos», señala el doctor Mark Litwin, catedrático de Urología de la UCLA.
Los mayores riesgos del trasplante son el posible rechazo del órgano por parte del cuerpo y los efectos secundarios causados por los inmunosupresores que se administran obligatoriamente para prevenir el rechazo. «Debido a la necesidad de inmunosupresión a largo plazo, los mejores candidatos actualmente son quienes ya reciben inmunosupresión o tienen una necesidad inminente de ella», afirma Nassiri.
Nassiri, ex residente de urología en la Escuela Keck y ahora profesor adjunto de urología y trasplante renal en la UCLA, y Gill trabajaron juntos durante varios años en la Escuela Keck para desarrollar la nueva técnica quirúrgica, diseñar ensayos clínicos y obtener las aprobaciones regulatorias necesarias.
Ambos médicos colaboraron durante varios años para desarrollar la técnica quirúrgica. Se realizaron numerosos procedimientos preclínicos en la USC y OneLegacy, la organización de obtención de órganos del sur de California, para preparar el primer trasplante de vejiga humana.
Durante el complejo procedimiento, los cirujanos trasplantaron el riñón donado, seguido de la vejiga. Los dos nuevos órganos se conectaron mediante la técnica pionera de Nassiri y Gill. El procedimiento completo duró aproximadamente ocho horas.
El tratamiento actual para casos terminales graves de disfunción vesical o para la extirpación de la vejiga por diferentes patologías incluye el reemplazo o la ampliación del reservorio urinario. Estas cirugías utilizan una porción del intestino del paciente para crear una nueva vejiga o una vía para que la orina salga del cuerpo. Si bien pueden ser efectivas, conllevan muchos riesgos a corto y largo plazo, que comprometen la salud del paciente, como hemorragias internas, infecciones bacterianas y problemas digestivos.
«Un trasplante de vejiga, por otro lado, da como resultado un reservorio urinario más normal y puede evitar algunos problemas a corto y largo plazo asociados con el uso del intestino», asegura Nassiri.
Al ser un primer intento en humanos, naturalmente existen muchas incógnitas asociadas con el procedimiento, como el funcionamiento inmediato y a largo plazo de la vejiga trasplantada, y cuánta inmunosupresión necesitará.
«A pesar de las incógnitas, nuestro objetivo es comprender si el trasplante de vejiga puede ayudar a los pacientes con vejigas gravemente comprometidas a llevar una vida más saludable», aclara Gill.
Los trasplantes de vejiga no se han realizado anteriormente, en parte debido a la compleja estructura vascular de la zona pélvica y a la dificultad técnica del procedimiento. Como parte de la etapa de investigación y desarrollo, Nassiri y Gill realizaron con éxito numerosas cirugías de trasplante en el Centro Médico Keck de la USC, incluyendo las primeras recuperaciones robóticas de vejiga y trasplantes robóticos exitosos en cinco donantes recientemente fallecidos con función cardíaca mantenida con asistencia respiratoria.
Los dos cirujanos también realizaron varias pruebas no robóticas de recuperación de vejiga en OneLegacy, lo que les permitió perfeccionar la técnica mientras colaboraban estrechamente con equipos quirúrgicos multidisciplinarios.
El procedimiento se realizó como parte de un ensayo clínico en UCLA, pero Nassiri y Gill esperan realizar más trasplantes de vejiga en un futuro próximo.
abc